“No es justo”: la frase que te hace una víctima sin que te des cuenta

Por Guillermo Iglesias Arroyo

Lucía es una líder comprometida, de esas que siempre sacan la chamba, cumplen objetivos y están para su equipo. Pero en los últimos meses algo se rompió: ya no proponía ideas, se notaba más distante, y su energía simplemente... no estaba.

Todo empezó con una promoción que no le dieron. Una frase empezó a rondarle la cabeza todos los días:

“No es justo”

Hace unos días me recomendaron un clásico que vale mucho la pena, Tus zonas erróneas del autor Wayne Dyer. Entre varios capítulos quiero destacar uno que es muy común en todos los entornos laborales y que no hay semana que no me encuentre en alguna conversación, es una creencia que te inmoviliza y este argumento vale oro: vivir esperando que todo sea justo es una forma elegante de quedarte estancado. Porque mientras esperas que el mundo te compense, la vida sigue —con o sin tu participación.

Y sí, a veces no es justo. Pero ¿qué vas a hacer con eso? Algunos de los síntomas son los siguientes:

• Comparaciones constantes con colegas.

• Quejas sutiles (o abiertas) que contaminan el ambiente.

• Pérdida de enfoque: más energía en lo que “debería ser” que en lo que puedes hacer.

  
  

El problema no es que algo sea injusto. El problema es usar esa injusticia como excusa para dejar de crecer. Eso es muy peligroso, porque cuando te conviertes en víctima, dejas tu futuro en manos de alguien más.

Acá te comparto 3 ideas para salir de la trampa de la justicia

1. Hazte esta pregunta clave:

¿Esta idea me está dando poder o me lo está quitando?

2. Recupera tu poder de decisión

   Aunque no controles todo, siempre puedes elegir cómo reaccionar. Eso es liderazgo.

3. Deja de pelear con la realidad

   En lugar de repetir “no es justo”, cámbialo por: “Esto es lo que hay. ¿Qué sí puedo hacer con esto?”

Lucía entendió que quedarse en la queja y ser víctima no le iba a devolver la promoción, ni la motivación. El día que dejó de exigir justicia externa y se enfocó en su propia evolución, algo cambió: volvió a brillar. No porque el sistema cambiara, sino porque ella cambió su postura ante el sistema. Dejó de ser víctima y buscar verdugos, tomó en sus manos la responsabilidad de su realidad.

“Si te esperas a que todo sea justo para avanzar, te vas a pasar la vida esperando.”— Warren Buffett

¿Y tú? ¿Vas a seguir esperando justicia o vas a tomar el control y avanzar con lo que hay?Porque el que sigue caminando, incluso en terreno disparejo, al final siempre llega más lejos.

Estamos al habla...