Por Maria Fernanda Reyes
Hola, quiero compartirles un pequeño fragmento de cómo mi vida ha dado un giro de 360 grados y la magia que he experimentado en los últimos meses.
Durante toda mi vida atendía conferencias o escuchaba en mis clases de la escuela acerca del autoestima, autoaceptación, superación personal etc…
Mencionaban aspectos interesantes brindándonos un panorama bonito y agradable para nosotros; sin embargo, creo que no explican con claridad qué es eso realmente ni tampoco te indican cómo lograrlo.
Recientemente en mi día a día , he tenido en mente que todos somos seres espirituales viviendo una experiencia humana en donde el alma eligió venir a esta vida a experimentar, aprender y trabajar lo que actualmente vivimos; elegimos a nuestros padres, el ambiente en el que decidimos vivir etc...
Cuando somos niños nuestros progenitores nos crean heridas en el alma, heridas que nos impiden ser nosotros mismos. Las heridas son: rechazo, abandono, humillación, traición e injusticia, cada quien elige qué herida viene a experimentar en esta vida, puede que tengas la herida de rechazo, una herida ligera de abandono o quizá solo tengas la herida de humillación, entre más profunda es la herida más sale nuestro EGO a relucir.
El famoso EGO ¿Qué es eso realmente?
Cuando nos causan heridas creemos que hay algo malo en nosotros y por esta razón creamos lo que llamamos el EGO, probablemente lo conozcamos de otra manera o lo imaginamos diferente.
El EGO es el ser que creamos para protegernos de las heridas que fueron causadas en nuestra infancia, este personaje es nuestro aliado y no permite que nos lastimen. Un ejemplo para demostrar que el EGO tiene el control de tus heridas es la persona que durante la primaria es duro con sus compañeros; este ejemplo fue mi historia, siendo una de mis estrategias infantiles que me protegía para no mostrar que estaba herida; sin embargo, esta estrategia infantil que todos creamos la llevamos a nuestra vida adulta siendo poco útil.
El EGO tiene fecha de expiración y al expirar, nos toca empezar a sanar nuestra alma ya que al no hacerlo podemos terminar como personas que no sanaron nada durante su vida evitando lo que todos buscamos… sentirnos plenos y satisfechos con nuestras acciones.
Por esta razón nos toca decirle al EGO que a partir de ahora nosotros decidimos llevar el control y no dejar que él tome las riendas, agradeciendo su rol de haber cuidado de nosotros cuando éramos pequeños.
Todos nacemos con heridas, al identificarlas y sanarlas estamos más cerca de alcanzar el amor propio, que es lo que nos permite conocernos y aceptarnos, ante este escenario deseado finalmente surgen estas preguntas: ¿Cómo voy a amarme si ni siquiera me conozco? ¿De qué manera voy a lograr los objetivos que quiero si no conozco lo que quiero y lo que no? ¿Cómo voy a amar a alguien más si no me amo a mi misma?
Las antesalas del amor propio son: la autocompasión, autorespeto y autovaloración.
Empezando por la primera ¿Cómo voy a ser autocompasiva conmigo misma si no entiendo desde que lugar estoy haciendo las cosas, si no veo mi proceso de vida? ¿Realmente acepto que no siempre puedo hacerlo todo “bien”?
Debemos aceptar que somos humanos y no somos perfectos para exigirnos y esperar siempre ser perfectos, entender que somos luz y a la vez oscuridad viniendo a experimentar en esta interesante travesía, si ya estamos aquí ¿Por qué no disfrutar nuestro viaje siendo nosotros mismos?
Desde el día que sanemos aspectos importantes de nuestro viaje, viviremos menos situaciones de sufrimiento, viviendo en el "ahora" mientras nos amamos genuinamente, al final del día en nuestro viaje somos nosotros los más grandes protagonistas y el amor propio será nuestro fiel acompañante en nuestra vida.
Te recomiendo los siguientes pasos para empezar a conocerte y sanar:
1. Identificar tus heridas (Te recomiendo leer el libro de “Las cinco heridas que impiden ser uno mismo" por Lise Bourbeu).
2. Aceptarlas y sanarlas (Contar con asesorías/consejería es un punto fundamental, Martha Debayle importante psicóloga mencionaba que tener un mentor debe de estar en la canasta básica del ser humano, igual te recomiendo que vayas con alguien que sea el mejor acompañamiento para ti).
3. Haz uso de rituales y comienza a construir hábitos positivos (puede ser meditar, agradecer, tomarte un tiempo solo para ti).
Es de valientes atreverse a ir al rescate de nosotros mismos, el camino será complicado ya que no nos gustarán algunas partes del proceso; sin embargo, es nuestro lado oscuro que también debemos de aceptar e incorporar de la mejor manera posible en nuestra vida.
Y recuerda que nada puede ser cambiado desde la mentira, es importante aceptar, honrar y disfrutar nuestro proceso.
Gracias por tu reflexión. La encontré muy valiosa. Solo quisiera comentarte que si tu vida da un giro de 360 grados quedas igual que como estabas al principio. El giro que cambia todo es de 180 grados. Saludos y mil gracias.
Es muy acertada la reflexión, pero el grave problema es que no reparas en el hecho de que el ego no es algo que nosotros los humanos creamos, sino algo que se introdujo con la caída del hombre en pecado. De ahí es algo innato que viene en cada uno. Esta perspectiva de ninguna manera contradice gran parte de tu reflexión según el punto de vista psicológico....las dos perspectivas (religiosa y psicológica) tienen muchos puntos en común, pero en algunas (como la observación que te he mencionado) debe prevalecer el punto de vista divino.